SÍ A LA VIDA

El teólogo de la Liberación y ex fraile franciscano, Leonardo Boff, se pronunció hoy aquí en contra del aborto, pero reconoció que a él le parece "excesivo" que la Iglesia católica "trate de imponer su visión a todos los demás". "Yo estoy en contra del aborto", dijo el religioso brasileño al ser consultado por Notimex sobre la despenalización de esa práctica y añadió que "hay que estar a favor de la vida en todas sus formas y en todas sus fases".
Boff recordó que "vivimos en una sociedad pluralista, con varios valores éticos y el Estado tiene un carácter laico. Entonces el Estado tiene que escuchar muchas voces" para adoptar sus resoluciones, como en el caso de la Corte Suprema de México.
El pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de México avaló este jueves la constitucionalidad de las leyes que despenalizan el aborto en el Distrito Federal antes de las 12 semanas de gestación.
Boff añadió que "le cabe a la Iglesia decir su voz. Pero a mí me parece excesivo imponer su visión a todos los demás, imponer su visión a todo el Estado, a toda la sociedad".
El teólogo, quien participa en Chile en actividades de defensa del medioambiente, consideró que la tarea de la Iglesia católica es ahora "intentar, con el diálogo, crear condiciones para que menos vidas sean sacrificadas".
"No es solamente una actitud de oposición, negación, como antes de que fuera aprobado. Ahora el tema es como crear comisiones, grupos que puedan acompañar, convencer personas, disminuir el aborto en una dimensión más pastoral de la Iglesia", indicó.
El ex fraile brasileño participó en la presentación de la "Carta Pastoral del Agua", realizada el pasado martes en la austral ciudad de Aisén y en la cual el obispo chileno Luis Infanti denunció el "ecocidio" en la Patagonia chilena.
El documento es un alegato contra el modelo económico neoliberal y contra un conjunto de megacentrales hidroeléctricas que la empresa Hidroaisén planea instalar en la Patagonia chilena.
La carta propone cambios en la Constitución Política del Estado chileno, y la nacionalización del agua.